Alcácer y las prisas.

Cuatro goles en tres partidos, estos son los datos de Paco Alcácer en los últimos partidos, el joven ariete valencianista y una de las grandes promesas de la cantera blanquinegra. El valenciano poco a poco se está ganando un puesto en el XI, y un lugar en el corazón de los aficionados chés.

Es algo perfectamente normal y lícito que la hinchada de ilusione con un jugador de la casa cuando este responde. Y más cuando se ve que el protagonista se trata de un valencianista de pro cómo es Paco, pero ahora es cuando me gustaría hacer un llamamiento para mantener la cabeza fría.

Alcácer se trata de un chaval de 20 años que todavía no ha alcanzado los 10 goles en Primera. No quiero ser aguafiestas, ni desmerecer al chaval, pues es un delantero con mucho futuro y que lleva el gol en las venas. No obstante, si quiero que se tenga paciencia con él y no perdamos la perspectiva.

Ahora mismo está de dulce, y hay que aprovechar esa circunstancia puesto que los atacantes viven de rachas. Pero es posible que le venga una mala, bueno miento, es totalmente seguro que le vendrán momentos malos, de duda, dónde pague su inexperiencia. Porque le queda todavía mucho camino que recorrer, mucho que fallar.

Estoy encantado con qué mi paisano esté atravesando un momento tan dulce, más sabiendo que no será el único de su carrera ya que es evidente que es un killer de los de toda la vida, oportunista, rematador, un tipo de área. Yo lo que no quiero es que se le cargue de una responsabilidad que no merece, que le llenemos la mochila de la ilusión de presión.

Disfrutemos con él, apoyémosle, quememos etapas con naturalidad. Y cuando encadene cinco partidos seguidos sin marcar gol ni tocar la pelota (algo que le sucede a TODOS los delanteros del mundo), sigamos teniendo claro que si queremos, ahí hay jugador para rato.

@gustoparticular