Nos lo merecemos.

Como diría Míchel González después de anotar aquel gol a Corea del Sur en el Mundial de 1990; "!me lo merezco!", pues eso podemos decir aliviados, contentos y orgullosos los valencianistas hoy, nos merecemos ésta alegría después de tanto sufrir.

Después de años sin una victoria contra uno de los dos transatlánticos (contra el Barça la última fue en 2007, en el Camp Nou en septiembre de 2003), ya tocaba pintarles la cara, hacerles recordar a ellos y a todos que aquí estamos, que las leyendas no mueren nunca, que los grandes siempre vuelven si es que alguna vez se fueron.

Sorteando todo tipo de dificultades, un gol en contra a los seis minutos, la ayudita de rigor del colegiado cuando lo necesitaban, la crisis social, de resultados...el VCF rememoró viejas glorias y tomó el Camp Nou. Es el triunfo número 12 en el feudo barcelonista, y de paso, el Valencia se consolida cómo el equipo que más veces ha ganado en casa de un líder en la historia de la Liga.

El definitivo 2-3 encima lo marcó uno de mi pueblo, Paco Alcácer. El torrentino poco a poco va haciéndose un hueco en el once, lleva el gol y el valencianismo en las venas. Cómo se demostró con el grito de rabia en la celebración. Fantásticos estuvieron prácticamente todos, especialmente R Costa, Feghouli, Oriol Romeu o Javi Fuego, Parejo merece mención especial. Ahora mismo, esto funciona así: Parejo y 10 más, quién lo iba a decir hace un año. Pero sin embargo, los protagonistas no son ellos.

Me alegro especialmente por toda la chiquillada valencianí que todavía no había visto a su equipo ganar al FCB o el RM. Partidos cómo estos son los que aseguran la militancia de los más pequeños, cada vez con más dificultades para seguir la tradición de sus padres de sentir en el pecho el escudo del murciélago.

Por primera vez en mucho tiempo, serán ellos los que en Valencia, España y el mundo sonrian el lunes en el colegio.

A ellos, a todos nosotros, va dedidada ésta victoria.

Somos grandes.

!Amunt València!.

@gustoparticular